Alto, oscuro y peligroso, Kage es tan atractivo como secretos guarda. Aunque sé que está ocultando algo, me siento atraída por él como una polilla a la luz. Las llamas crepitan entre nosotros con cada mirada, el deseo se convierte en pasión y me derrumbo con fuerza, incapaz de resistir.
Pero luego descubro que lo han enviado a cobrar una deuda que mi prometido dejó sin saldar... Y esa deuda soy yo.