En Castringham Hall, Sir Matthew Fell condena a la horca a la supuesta bruja Mrs. Mothersole, quien advierte: "Habrá huéspedes en la Mansión." Poco después, aparece muerto en su cama, ennegrecido y retorcido, sin causa aparente. Décadas más tarde, su descendiente Sir Richard muere del mismo modo, en la misma habitación occidental junto al gran fresno. Cuando el árbol es incendiado, de él surgen arañas monstruosas y peludas, y dentro se descubre el cadáver reseco de una mujer.