La navidad estaba iniciando, las personas transitaban las calles de New York, mientras que la emisora "Crítica" daba comienzo a su especial navideño “Hoy nadie se salvará” teniendo como anfitrión a su dueño y locutor, Armand Lowell, con las primicias menos alegres y siempre acompañado por buena música, a sabiendas de que incluso en épocas festivas lo más horrible puede ocurrir.