Luego de recorrer el paÃs y recopilar informaciÃŗn sobre rituales y mitos que eran conocidos por pocos, pues se transmitÃan de forma oral solo a iniciados en la religiÃŗn, escribe El Monte, considerada por muchos una obra maestra, una especie de Biblia de las religiones afrocubanas, en la cual, segÃēn su propia autora, su mÊrito radica en que son los mismos negros de Cuba los que hacen el libro, sin mediar el filtro cientificista.
Con su lenguaje, la autora refleja las creencias de los negros y su misticismo, arraigado en el pueblo cubano desde los tiempos de la esclavitud colonial.
âHa sido mi propÃŗsito ofrecer a los especialistas, con toda modestia y la mayor fidelidad, un material que no ha pasado por el filtro peligroso de la interpretaciÃŗn, y de enfrentarlos con los documentos vivos que he tenido la suerte de encontrar.
âHe cuidado siempre de deslindar, en el mapa mÃstico de las influencias continentales heredadas, las dos ÃĄreas mÃĄs importantes y persistentes: la lucumà y la conga âyoruba y bantÃēâ, confundidas largo tiempo por los profanos, y que se suelen catalogar bajo un tÃtulo errÃŗneo e impreciso: ÃąaÃąiguismo.â
Lydia Cabrera (1900-1991) naciÃŗ en el seno de una familia de ilustres criollos y completÃŗ sus estudios en Francia. Destacada etnÃŗloga, investigadora y narradora cubana. Sus estudios sobre la presencia y huellas de la cultura africana en la Isla en sus aspectos lingÃŧÃsticos y antropolÃŗgicos son de ineludible consulta. Iniciada en el folklore afrocubano por Fernando Ortiz, el mÃĄs importante etnÃŗlogo y antropÃŗlogo de Cuba. Desde su regreso a Cuba y hasta su muerte dedicÃŗ su vida a una intensa labor de investigaciÃŗn de campo, fundada principalmente en un estrecho y cordial acercamiento a innumerables informantes, recogida en cientos de artÃculos y mÃĄs de una veintena de libros, entre los que sobresale El Monte. Notas sobre las religiones, la magia, las supersticiones y el folklore de los negros criollos y del pueblo de Cuba (1954), considerado como la Biblia de la cultura afrocubana. Reconocida, entre otros, por Roger Bastide, MarÃa Zambrano, Gabriela Mistral y Federico GarcÃa Lorca, quien le dedica âÂĢA Lydia Cabrera y su negritaÂģâ el poema ÂĢLa casada infielÂģ. PartiÃŗ al exilio en 1960 y, despuÊs de una larga estancia en Madrid, muriÃŗ en Miami. En Verbum hemos publicado ademÃĄs su libro Cuentos Negros (2014).