Tay Dawson prefiere el silencio del amanecer y la compañía de sus mustangs a la bulliciosa vida de pueblo. Su rancho solitario en Montana es su santuario—hasta que la llegada inesperada de una fotoperiodista carismática amenaza con romper sus defensas. Morgan Ellis viene en busca de historias, pero lo que encuentra en la mirada reservada de Tay es algo más profundo: una conexión imposible de ignorar.
Mientras entrenan caballos salvajes y enfrentan tormentas del pasado, Tay y Morgan descubren que algunas heridas sólo sanan cuando se permite entrar a alguien nuevo. ¿Podrá Tay dejar atrás el miedo y abrir su corazón antes de que Morgan siga su camino?
Una novela conmovedora sobre redención, segundas oportunidades y el amor que se construye paso a paso—como domar a un mustang asustado.
Perfecta para lectoras de romance lésbico que aman los escenarios rurales, los caballos y las protagonistas fuertes y vulnerables.