DespuÊs de convertirse en uno de los jÃŗvenes poetas espaÃąoles mÃĄs exitosos del momento, Miguel Gane publica ahora una primera novela honesta y muy personal.
EntraÃąable, descarnada, real: asà es la primera novela de Miguel Gane.
Yo tenÃa nueve aÃąos y vivÃamos todavÃa en RumanÃa, en un pueblo pequeÃąo al borde de la montaÃąa. Recuerdo el frÃo, la ropa congelada, el olor a leÃąa y las brasas del fuego apagÃĄndose en la estufa, pero sobre todo recuerdo la pobreza. Allà aprendà el significado de la supervivencia, hasta que una noche de mayo mi madre me susurrÃŗ unas palabras que cambiarÃan mi vida para siempre: ÂĢCuando seas mayor entenderÃĄs por quÊ nos fuimosÂģ.
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A travÊs de la mirada de un niÃąo, Miguel Gane nos presenta en su primera novela una historia que narra el drama de la miseria de una familia y su determinante decisiÃŗn de emprender un viaje a lo desconocido. Un relato de superaciÃŗn y de bÃēsqueda que nos descubre la realidad de la inmigraciÃŗn desde una visiÃŗn tan inocente como descarnada.
La crÃtica ha dicho...
ÂĢEs difÃcil pensar que haya alguien en nuestro paÃs que no haya leÃdo alguno de los poemas de Miguel Gane, ya sea queriendo o sin querer.Âģ
La RazÃŗn
ÂĢCon tal de verte volar es un manifiesto lÃrico -urbano, sexual, empapado en cerveza- contra las relaciones tÃŗxicas, contra las pasiones que se sustentan en control y dependencias.Âģ
El EspaÃąol
ÂĢUna poesÃa llena de calle, de cine, de rock y de referentes urbanos que habla fundamentalmente sobre el amor y sobre cÃŗmo nos salvamos del dolor que este supone irremediablemente a travÊs de la literatura.Âģ
Todoliteratura.com
Miguel Gane (George Mihaita Gane) naciÃŗ el 20 de julio de 1993 en Leresti, RumanÃa. Es autor de los poemarios Con tal de verte volar, Ahora que ya bailas, La piel en los labios, Ojos de sol y Puedes hacerme lo que quieras, asà como de la novela Cuando seas mayor y del cuento ilustrado "Algo mÃĄs que el bosque". Nunca ha ganado ningÃēn premio. Su nombre no ha firmado ninguna columna periodÃstica. Sus estudios son irrelevantes porque nada -Âŋo sÃ?- tienen que ver con la literatura.