La mรญtica ciudad de Cรญbola y la bรบsqueda de un nuevo El Dorado condujeron a Francisco Vรกzquez de Coronado al sur de los Estados Unidos (1540-1542). Por primera vez, ojos europeos veรญan aquellas tierras: inmensos desiertos, caรฑones colorados, grandes llanuras repletas de bisontes, peligrosas tribus indรญgenas, entre ellas los apaches... Fueron aรฑos de conquista y evangelizaciรณn de una parte aรบn desconocida del Nuevo Mundo, aรฑos plagados de enfrentamientos y enfermedades, pero tambiรฉn de glorias y objetivos conseguidos. Unos tiempos que vieron masacres en ambos bandos, sufridas y cometidas, o hechos tan fundamentales en la Historia como la caรญda de la civilizaciรณn mexica; pero que a su vez, fueron, como todos, tiempos de seres humanos que vivieron, sufrieron, amaron y murieron; hombres y mujeres (รฉstas con un papel olvidado), que conformaron un mundo que aun hoy nos deslumbra. Y es la mirada abierta, inconformista, asombrada y admirada de un franciscano, fray Tomรกs de Urquiza, quien nos cuenta su historia. Aรฑos despuรฉs, en 1564, rememora la expediciรณn en la que, veinte aรฑos antes, acompaรฑara a Coronado... y, desde entonces, nunca nada fue igual. Como si fuera un antiguo cronista de Indias, Ignacio del Valle nos regala una narraciรณn vibrante y a la vez meticulosa, en la que las imรกgenes cinematogrรกficas llegan al lector como si de un primer plano se tratara. Y junto a fray Tomรกs, gracias a su acertada visiรณn, llena de pros y contras, nos sumergimos en el Nuevo Mundo de mediados del siglo XVI.